Me encanta la repercusión que tiene Raphael en Rusia. Es admirable. Y me alegra que aparezca en exposiciones porque su relación con el país es para estudiarla con profundidad. Su presencia allí generó un impacto que aún a día de hoy sigue llamando la atención.
Que continúen las exposiciones y se mantengan vivas la ilusión y la pasión por Raphael.